¿Cuántas veces te cepillas los dientes al día? En automático tu respuesta podrá ser “tres”, pero ¿realmente realizas tres cepillados al día? o ¿lo haces de forma correcta? Porque cepillarse los dientes de forma correcta es tan importante como realizarlo tres veces al día.
Cepillarse los dientes es una de las partes más importantes de la higiene bucal diaria y aunque pueda parecer una actividad innecesaria y aburrida, de no realizarse de forma adecuada, las consecuencias pueden verse reflejadas en enfermedades bucales. Para evitar esto, es importante conocer la anatomía del cepillado dental.
Paso 1: Elige el cepillo adecuado
Antes de empezar a cepillarte, asegúrate de tener el cepillo adecuado. Debe tener cerdas suaves para no dañar el esmalte de tus dientes, y tener un tamaño que se adapte a tu boca. Además, es recomendable cambiar el cepillo cada tres meses o antes si las cerdas están desgastadas.
En el mercado existe una variedad de cepillos para que esta herramienta te sea realmente útil, aquí te dejamos una breve guía para elegir el adecuado:
Tipos de cepillos dentales
Cepillo dental manual: éste es el cepillo más común. Está hecho de cerdas sintéticas y tiene un mango de plástico. Suelen ser económicos y accesibles. Existen en una variedad de tamaños, formas y durezas de cerdas. Es común que los pacientes prefieran un cepillo con cerdas suaves, ya que son menos abrasivos para los dientes y las encías. Sin embargo, es importante asegurarse de que el cepillo se adapte adecuadamente a la boca y que las cerdas lleguen a todas las superficies de los dientes.
Cepillo dental eléctrico: Los cepillos dentales eléctricos se han vuelto cada vez más populares. Utilizan la electricidad para mover las cerdas de manera automática, lo que facilita el cepillado. La mayoría de los cepillos eléctricos tienen diferentes modos de cepillado y temporizadores para asegurarse de que se cepillen durante el tiempo adecuado. Estos pueden ser una buena opción para personas con problemas de movilidad en las manos o para aquellos que deseen un cepillado más efectivo.
Cepillo dental sónico: Los cepillos dentales sónicos son una variante de los cepillos eléctricos. Al contrario de los eléctricos, estos utilizan ondas sónicas para mover las cerdas, lo que crea una vibración que ayuda a eliminar la placa dental. Su precio puede ser más elevado que los cepillos manuales y eléctricos, pero pueden resultar muy efectivos para limpiar espacios interdentales y en áreas de difícil acceso.
Cepillo interdental: Los cepillos interdentales son cepillos con un mango largo y delgado y cerdas pequeñas que se usan para limpiar entre los dientes. Son útiles para personas con espacios grandes entre los dientes o para aquellos que usan frenillos. Los cepillos interdentales también pueden ayudar a prevenir la enfermedad de las encías y la caries dental en áreas donde los cepillos normales no pueden alcanzar.
Paso 2: Usa la cantidad correcta de pasta dental
Agrega una cantidad de pasta dental del tamaño de un guisante a tu cepillo de dientes. No es necesario usar demasiada pasta dental, ya que puede hacer que te enjuagues demasiado y escupas antes de tiempo.
Paso 3: Coloca el cepillo en un ángulo de 45 grados
Coloca el cepillo en un ángulo de 45 grados contra tus dientes y encías. De esta manera, las cerdas del cepillo entrarán en contacto con ambas superficies de tus dientes y las encías.
Paso 4: Cepilla en pequeños círculos
Comienza a cepillarte en pequeños círculos, moviendo el cepillo hacia adelante y hacia atrás a medida que avanzas. Asegúrate de cubrir todas las superficies de tus dientes, incluyendo las caras interiores y exteriores y las superficies de masticación.
Paso 5: Cepilla suavemente las encías
Cepilla suavemente tus encías con el cepillo de dientes para eliminar la placa y las bacterias que se acumulan en esa zona. No apliques demasiada presión en las encías para evitar causar daño.
Paso 6: Enjuaga y escupe
Después de cepillarte durante al menos dos minutos, enjuaga tu boca con agua y escupe la pasta dental. No te enjuagues con demasiada fuerza, ya que esto puede dañar tus encías.
Paso 7: Limpia la lengua
Usa un limpiador de lengua o tu cepillo de dientes para limpiar tu lengua y eliminar las bacterias que se acumulan en esa zona.
El cepillado diario es importante para mantener una buena higiene bucal, pero el uso del hilo dental es igualmente crucial para eliminar la placa y las bacterias que se acumulan en lugares de difícil acceso.
- Es importante elegir el tipo de hilo dental adecuado. Existen diferentes tipos de hilo dental en el mercado, como hilo dental encerado, sin cera, con sabor, etc. Elige el que más te guste, pero asegúrate de que sea efectivo para eliminar la placa y las bacterias.
- Corta una longitud adecuada de hilo dental (aproximadamente 45 cm) y enrolla los extremos del hilo en los dedos medios de ambas manos, dejando un espacio de unos 5 cm entre ellos.
- Entra con cuidado entre los dientes. Desliza suavemente el hilo dental entre los dientes, asegurándote de no lastimarte las encías. Usa un movimiento de vaivén para limpiar suavemente cada lado del diente. También es importante no forzar el hilo dental, ya que esto puede causar daño a las encías.
- Limpia las encías: Desliza el hilo dental bajo la línea de las encías, haciendo una forma de “C” alrededor del diente. Con un movimiento suave, sube y baja el hilo dental varias veces para asegurarte de eliminar toda la placa y las bacterias
- Utiliza un trozo de hilo dental limpio para cada diente. No reutilices el mismo trozo de hilo dental, ya que esto puede propagar las bacterias de una zona a otra.
Consecuencias de cepillarse mal los dientes
Cepillarse los dientes diariamente es una de las medidas más importantes que podemos tomar para cuidar nuestra salud dental, no cepillarse bien los dientes puede tener consecuencias graves para nuestra salud en general.
Algunas de las consecuencias más comunes es la generación de placa dental, la cual es una sustancia pegajosa que se forma en la superficie de tus piezas dentales. Si esta no se elimina por medio del cepillado dental puede acumularse, endurecerse formando sarro y aumentado las posibilidades de generar caries dentales.
Otra consecuencia de un mal cepillado es la posibilidad de padecer una enfermedad periodontal o también conocida como enfermedad de las encías, la cual es una infección bacteriana que afecta a las encías y los dientes. Si no se elimina la placa bacteriana, puede acumularse debajo de las encías y causar inflamación y sangrado. Con el tiempo, la enfermedad periodontal puede provocar la pérdida de los dientes.
Por último, a nivel estético y de cuidado personal, una mala limpieza dental puede ser la principal causa de un mal aliento y la principal razón de la aparición de manchas en los dientes. Si no se cepillan los dientes con regularidad, las manchas y la decoloración pueden comenzar a aparecer en la superficie de los dientes.
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