En tu visita al dentista seguro has oído hablar sobre las resinas dentales. ¿Sabes lo que son? ¿De qué se componen? Conocer este procedimiento dental, es esencial para acordar junto a tu dentista lo mejor para tu salud bucal y tu estética.
La resina dental es un compuesto comúnmente usado para restaurar la estructura de los dientes cuando se dañan. Ya sea por una composición de caries, grieta o fractura, casi todos hemos requerido de una resina, ya que su principal función es la restaurar la estructura del diente para hacerlo mucho más estético y funcional. Además de ser una aliada en tratamientos estéticos y materiales de relleno u obturación.
¿De qué se componen las resinas dentales?
Las resinas dentales o composites están hechas de un componente orgánico polimérico llamado matriz orgánica y un componente inorgánico, el cual actúa como un mineral de relleno que puede ser de diferentes materiales como cuarzo, zirconia o silicatos de aluminio.
Para conseguir la unión de ambos componentes, a veces es necesaria la presencia de un agente que haga que se acople. Al igual que otros métodos de unión, como la amalgama, las resinas dentales están hechas de diferentes materiales sintéticos mezclados de forma heterogénea.
¿Qué son estos componentes? Son componentes de cohesión y refuerzo. Los de cohesión se encargan de envolver o encapsular a los de refuerza para que estos mantengan sus rigidez y posición; mientras que, los de refuerzo proporcionan la resistencia necesaria para mantener su posición.
Usos de la resina dental
El uso de resinas es muy común, pero si no conoces su utilidad aquí te lo explicamos, ya que es usada en múltiples tratamientos odontológicos. A nivel de estética, es muy común para la reparación de dientes astillados o fracturados debido a que resulta ser un gran material para restaurar piezas gastadas, fracturas y fisuras.
Su uso cosmético se debe a que una vez que se coloca la resina sobre el diente y se la adecuada densidad de luz, es posible que el material logre mimetizar casi por completo el color del diente natural haciendo de cualquier reparación, algo casi imperceptible.
Otro uso común es el de cubrir manchas. Durante este procedimiento muy parecido al de las reconstrucciones, se usan materiales de baja viscosidad para permitir que penetren y se adhieran con mayor facilidad al dientes para mantener dientes blancos sin usar carillas.
¡Y esto no es todo!, ya que también pueden ser usadas para disminuir el espacio entre dos piezas tomando en cuenta las proporciones de tu boca. Además, de que puede ser usada como apoyo para mejorar el borde de los dientes.
Como relleno
Quizá su uso más común es como material de relleno o de obturación en las caries e incluso, tras la extracción del nervio dental por infecciones. Cuando algunas de tus piezas dentales resultan dañadas, tu dentista puede reparar cualquier cavidad o agujero posterior a la curación sin afectar la estética, ya que simula el color de los dientes.
La resina es el material más usado para obturaciones, es decir, para rellenar cavidades creadas por caries para evitar la acumulación de bacterias.
Tipos de resinas dentales
Aunque es muy posible que en algún tratamiento dental, ya hayas utilizado una resina, aquí te explicamos algunas de las afecciones más comunes con uso de resina recomendado.
- Microrelleno: se emplea para rellenar cavidades generadas por caries o para la corrección de color en dientes.
- Híbrida: ya que posee una alta resistencia al estrés. Este tipo de resina se emplea para restaurar piezas dentales posteriores o para reconstrucción.
- Nanorelleno: estas resinas suelen ser usadas en micro relleno, ya que genera un acabado estético y de alta resistencia.
- Macrorelleno: estas son las resinas convencionales y suelen ser de baja eficiencia clínica, ya que pueden desprenderse con mayor facilidad.
Algunas de las ventajas del uso de resinas es que respetan la estética dental, además de tener una buena capacidad de adhesión a los dientes, tampoco desprenden componentes dañinos y resultan fáciles de usar para los expertos de la salud, ya que se puede usar en niños, jóvenes y adultos.
Es importante recalcar que el uso de resinas tiene una duración promedio de cinco a siete años. Sin embargo, esta media puede variar dependiendo de los cuidados que se les dé, como, por ejemplo, cuidar la ingesta de ciertos alimentos sólidos.
Cómo cuidar tu resina dental
Ahora que ya sabes lo que puede durar tu resina, estos son algunos consejos para alargar su vida:
- Evita morder alimentos duros como hielo y abrir empaques con los dientes, ya que esto puede hacer que la resina se astille.
- Moderar el consumo de alimentos con alto pigmentos como café, vino tinto, frutos rojos y ciertos caramelos, puede ayudarte a mantener el color blanco de tus resinas.
- Se aconseja evitar el consumo de cigarro, ya que los químicos alteran la estructura de la resina dental.
- Si padeces de bruxismo, es aconsejable el uso de protectores. Este elemento también es aconsejable si se practica algún deporte de alto impacto.
- Mantener consultas regulares con tu dentista para revisar el estado de tus resinas, es fundamental para alargar su vida.
Ahora que ya conoces un poco más de este tratamiento, no dudes en consultar a tu especialista de la salud oral por el tratamiento más adecuado para ti. Acude a cualquiera de nuestras clínicas y elige, junto a los expertos, la mejor solución para tu salud oral. Realiza tu cita aquí. ¡Te esperamos!
