Una verdadera salud bucal, no solo depende de la higiene y cuidado diario, también existen muchos factores que juegan un rol importante al momento de tener una correcta salud bucal.
La comida, como factor relevante para desarrollar enfermedades comunes como la caries, no es la única causa de esta enfermedad. También pueden existir otras sustancias que dañan los dientes. Además de los ya conocidos como el cigarro, alcohol o sustancias ilícitas, existen medicamentos que también pueden causar problemas en tu salud oral.
Adicionalmente, la saliva que tenemos en nuestra boca tiene también ciertas características que podrán tanto mejorar como agravar la salud de nuestra boca.
¿La saliva protege tus dientes de los medicamentos?
Aunque parezca mentira, es protectora de nuestra boca y dientes. A pesar de la cantidad de bacterias que tenemos en nuestra cavidad oral, tiene una función protectora para los elementos dentro de la misma.
Es producida por tres pares de glándulas salivales grandes y por cientos de glándulas pequeñas. Estas son las encargadas de producir lo que conocemos como “saliva” que en realidad es el “esputo”.
Su principal función es antibacteriana y antifúngica, en la que se da un aclaramiento que proporciona acción contra la placa y restos de alimentos, además protege contra los cambios del pH que pueden también agravar los síntomas de la caries.
También es regeneradora de tejidos bucales que se activa cuando existen lesiones bucales como llagas o procesos bacterianos que causan heridas. Otra propiedad por destacar es su capacidad lubricante. No sólo nos ayuda a la correcta deglución de alimentos y degustación, sino que es vital en la digestión durante el proceso conocido como “salivación”.
Por último y no menos relevante, es un remineralizadora del esmalte dental. Te recomendamos prestar atención a la hidratación de la boca.
¿Poca saliva para proteger de los dientes?
Si al contrario, tenemos poca producción de saliva, podemos favorecer el crecimiento de la placa bacteriana, caries e infecciones.
Muchos medicamentos causan resequedad de la boca, lo que se denomina médicamente como “Xerostomía”. Estos medicamentos actúan sobre las glándulas salivales disminuyendo la producción de saliva. Aquí te mencionamos algunos casos en los que los medicamentos podrían afectar la calidad y cantidad de tu saliva:
- Tetraciclinas: Su uso prolongado puede causar color amarillento en los dientes.
- Exceso de flúor: Afecta mayormente a niños en desarrollo. Cuando existe un exceso de flúor en los dientes aparecen manchas blancas en los mismos y a esto se le denomina fluorosis.
- Jarabes: Los medicamentos de este tipo pueden contener altas cantidades de azúcares, por lo que pueden tener los mismo efectos que los dulces. Una recomendación es leer detenidamente la etiqueta de ingredientes y siempre lavar los dientes tras su toma, sobre todo si se trata de los niños.
- Tratamientos para la hipertensión: Algunas fórmulas pueden hacer que disminuya la saliva y se desmineralicen los dientes.
- Anticonvulsivos: Algunos de estos pueden provocar que tus encías se hinchen y sangren.
- Medicamentos para osteoporosis: Los alendronatos sódicos y bifosfonatos tienen consecuencias a nivel del maxilar, lo cual puede producir necrosis mandibular. Esta medicación necesita cita previa al odontólogo para el reparo de daños y focos infecciosos, se producirá la necrosis.
- Inhaladores: Inhalar un medicamento a través de la boca puede ocasionar una infección por hongos conocida como candidiasis oral. Enjuagar la boca después de hacer uso del inhalador evitará las infecciones.
Es importante también informarle a tu odontólogo que estás en otros tratamientos en caso de que se te recete alguno de estos medicamentos. Igualmente, debemos recordar los cuidados esenciales de la salud buco-dental para poder tener dientes completamente saludables.
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